despertar inquietudes en aquellos lectores que no habían tenido oportunidad, tiempo o interés en ocuparse de estos aparentemente áridos temas.
Mi intención fue poner al alcance de los niños (de todas edades), nuevas aventuras, demostrarles que la Ciencia es campo fértil para la imaginación, que nuevos conocimientos son trampolín para cada vez llegar más lejos, que aunque cada vez encontremos mayores incógnitas y más preguntas por contestar, la búsqueda del conocimiento nos conduzca a un mundo mejor.
Aunque cada día más viejo, el tiempo me hace sentir ser más niño, me gustan más las flores y los pájaros, el arco iris, la belleza de una puesta de sol, las melodías descubiertas en la música, la armonía existente en este Universo del que tan poco sabemos.
Mi mundo de la electricidad, al que me he dedicado, me llena de satisfacciones y por eso me gustaría hacer partícipe de él a los niños, quienes con sus infinitas preguntas puedan irlo haciendo más extenso, al encontrar nuevas respuestas y mejores aplicaciones.
El futuro está lleno de promesas, cada puerta que se abre conduce a un nuevo camino lleno de sorpresas infinitas.
Si el limitado conocimiento de la Física de Newton, produjo la revolución industrial y liberó al hombre del trabajo manual, si la Física de Einstein nos dio la energía atómica y abre las puertas a nuevas fuentes de energía aún no aprovechadas, si la Física de Heisenberg ha hecho posible la Televisión, el Láser, los robots, las computadoras, etc. ¿Qué no nos traerán los nuevos conocimientos de la Física de ésta época Super con su superconductividad, superfluidez, superstrings?
Las promesas de nuestra niña (la Electricidad) ya adolescente, son enormes, cuando estos niños de hoy la vayan conociendo, podrán realizar proezas nunca antes imaginadas.
El mundo del futuro no tiene límites y confío en que la Inteligencia, la Razón y la Bondad, terminen por imponerse y sean capaces de unificar la armonía del Universo a la vida del hombre.
Estos niños de hoy son los dueños del futuro de la Humanidad, considero nuestra obligación encauzarlos por el camino del Conocimiento y la Verdad, que utilicen las experiencias de todos aquellos que los han precedido, que sobre los hombros de estos gigantes, sean capaces de alcanzar mayores alturas.
Que al abrir nuevas puertas al Conocimiento, obtengan mayores recursos para ponerlos al servicio de la Humanidad, que nuevos inventos aún insospechados proporcionen al Hombre mejores oportunidades para ponerlo en armonía con la Naturaleza, liberarlo del hambre, de la guerra y del odio.
Confío en que estos nuevos conocimientos, lo hagan más consciente de su ignorancia, quitándole la arrogancia de la necedad, dándole la humildad y la nobleza que lo conduzca a una vida mejor, a una vida de Armonía, a una vida de Belleza, a una vida de Amor.
Estoy seguro que la búsqueda de estas metas llegará a producir un hombre mejor, aunque quizás nunca llegue realmente a saber que son:
 LA ELECTRICIDAD Y ESAS COSAS.